Esta pandemia apareció como un ciclón y dejó patas arriba muchos proyectos que empezaban a gestarse a principios del 2020.
Abláname recogía el concepto de pastelería creativa y artesana. Recuperaba la calidad, el cuidado y el mimo en la elaboración del producto. Por ello dotamos de calidad premium a todo su lenguaje de marca. El logotipo forma parte de una etiqueta negra que envuelve al producto.
Ablana significa avellana en asturiano, una manera más de anclar la marca al concepto de tradicional y folclore local en combinación perfecta con la actualidad y modernidad del diseño y la creatividad.